An important conference on the effect of Giovanni Pascoli on Italian and European culture is being held this week in Argentina.
More than fifty researchers from Italy, Spain, Uruguay, Brazil and Argentina are seeking to shed some light on the integration of high culture and what could be termed “popular culture” in the language and literature of Italy.
This will be the main direction of the XVIII Congress of Italian Language and Literature Teachers and Researchers Association of Italian Language and Literature (ADILLI).
Last April marked a century of the death of one of the most important poets of the Italian literary history, and the conference will take a leading role in deciding just how important was Pascoli to European culture.
Giovanni Pascoli was one of the few Italian intellectuals of the late nineteenth century pursuing the same ends in Italian or Latin literature.
“He was a great interpreter of popular and social bodies of the Great Proletarian, as he defined Italy,” says Diego Poli, professor at the University of Macerata and specialist in the work of the author of Myricae.
“His poetic sensitivity was enhanced by his ability to listen,” insists Poli.
“Pascoli drew inspiration from such masters as Virgil, Dante and Homer but also from the peasants of Romagna and the Lucchesia with whom he shared his love of nature”.
His work is a fusion between unparalleled high culture and popular culture.
An Italian literary who’s great expressive power mixed popular Italian expressions with garfagnine, the Lucchesia Tuscan dialect.[dw-post-more level=”1″]
Si tiene in questi giorni in Argentina un importante ciclo di conferenze riguardante Giovanni Pascoli ed il suo contributo al panorama culturale italiano ed europeo.
Oltre cinquanta ricercatori provenienti da Italia, Spagna, Uruguay, Brasile e Argentina metteranno in luce l’integrazione tra cultura aulica e popolare nel linguaggio e nella letteratura italiana.
Questo è il tema del XVIII Congresso di Lingua e Letteratura italiana dell’Associazione dei Docenti e Ricercatori di Lingua e Letteratura italiana, in corso a Buones Aires dal 18 al 20 settembre.
Il centenario della morte di Giovanni Pascoli che si celebra quest’anno è l’occasione per approfondire quanto il poeta di Castelvecchio ha influito nel panorama culturale europeo: “È stato un grande interprete delle masse, della Grande Proletaria, come definì l’Italia – commenta Diego Poli, docente all’Università di Macerata e ricercatore pascoliano – La sua sensibilità poetica è stata amplificata dalla sua capacità di ascolto”.
“Pascoli ha tratto ispirazione da maestri come Omero, Virgilio e Dante così come dai contadini della Romagna e della Lucchesia, con i quali condivideva l’amore per la natura” Sottolinea ancora Poli confermando come la sua produzione sia un impareggiabile esempio di fusione tra cultura classica e popolare.
A sus compatriotas que regresan de su aventura en América les permite hablar su lengua mestiza, deja aparecer onomatopeyas y da lugar al fonosimbolismo –la lengua de los animales y de las cosas–. “Estamos delante de un maestro de la comunicación escrita, porque es un intérprete profundo de las exigencias de un mundo estrecho entre la tierra natal, que ya no puede saciar el hambre de sus hijos y la búsqueda de nuevas tierras. ¿Son esas las tierras de la esperanza del futuro? Pascoli está atravesado por los cambios radicales que traían aparejados la industrialización, por la melancolía de un mundo natural que se pierde. Hoy, con el cambio climático como una amenaza latente, su poética vuelve a ostentar dilemas contemporáneos.
La especialista en ópera Nora Sforza será otra de las animadoras del inminente congreso. “Intento plantear que el melodrama, que nace como un experimento cortesano en la casa del Conde de Bardi, (de donde surgirá la “Camerata Florentina”) se transforma, sobre todo en el siglo XIX, en un espectáculo en el que el público de los grupos más altos de la sociedad se mezcla con otros sectores populares”, afirma. Para esta docente de la Universidad de Buenos Aires y de la Dante Alighieri la tipología arquitectónica de los teatros italianos contribuyó a esa confluencia. Pero un papel mucho más efectivo y transformador para esa sinergia entre cultura alta y popular, entre públicos de las dos esferas, fue el que protagonizó el melodrama, definitivamente alejado de argumentos ligados a la mitología o a la sociedad de corte. “Se empezaron a presentar temas ligados a la historia fundamentalmente medieval y de los albores de la Modernidad clásica que el público podía reinterpretar en clave decimonónica, lo que contribuyó enormemente a la difusión de una lectura histórica ligada al proceso de la unidad italiana”, afirma. Por lo general se habla de Giuseppe Verdi por sus “óperas patrióticas”, que duraron hasta finales de los años 40, pero para Sforza los ejemplos de estas apropiaciones populares están documentados en otras óperas de compositores como Rossini, Bellini o Donizetti, por nombrar sólo a los más conocidos. “En este sentido, es por demás interesante la lectura que de esto hace Luchino Visconti en su filme Senso de 1954, basado en el cuento homónimo de Camillo Boito. Allí, Visconti, agrega una escena que no pertenece al texto pero sí documenta esta fusión de públicos en el ámbito teatral y estos corrimientos “históricos”, sentencia la escritora. – source
Universidad del Museo Social Argentino (Av.Corrientes 1723); Instituto Dante Alighieri (Rodríguez Peña 575). [/dw-post-more]